Superación

SUPERACIÓN PERSONAL

 

 ¿Qué es la superación personal?
 

"No améis lo que sois, sino aquello en lo que os convertiréis". Miguel de Cervantes

 

Nuestra vida esta llena de oportunidades, saber aprovecharlas y obtener los frutos deseados constituye el centro de nuestras aspiraciones. Actualmente se habla de excelencia personal y el éxito al alcance de la mano, sin embargo, muchas de estas fórmulas se enfocan a la solución de problemas y al logro de una posición económica preponderante, quedando cortas en lo que a la superación personal se refiere, la verdadera superación no tiene cantidad sino calidad. 

 

“La superación es el valor que motiva a la persona a perfeccionarse a sí misma, en lo humano, espiritual, profesional y económico, venciendo los obstáculos y dificultades que se presenten, desarrollando la capacidad de hacer mayores esfuerzos para lograr cada objetivo que se proponga. Si la superación es un deseo innato de los seres humanos ¿por qué en ocasiones nos detenemos? El principal obstáculo es nuestra persona, con temores encubiertos de excusas, con la vana esperanza de una oportunidad "de oro" o el momento adecuado para cambiar de vida; en el peor de los casos, la pereza y el pesimismo propios del conformista. La superación no llega con el tiempo, el simple deseo o con la automotivación, requiere acciones inmediatas, planeación, esfuerzo y trabajo continuo”


Superarnos no es ponernos a pensar o hablar, es hacer, es actuar en base a estrategias con el poder de una visión, misión, valores, metas y con pasión, poniendo todos nuestros sentidos y una voluntad férrea que no vacila ni tiene dudas, sino que actúa y es firme. Superarse es actuar y satisfacer nuestra misión para llegar a las metas, pensar sólo es un  paso previo y hablar es lo menos indicado, lo único importante es actuar. (Cruz: 1994).


 El hombre es un ser inacabado, de él depende mejorar, estancarse o retroceder.
 Superación es: mejorar, desarrollar nuestras cualidades y potencialidades y corregir nuestros defectos.
 La superación personal no es una competencia, va de adentro hacia fuera.
 La superación es continua y sin limites.
 Es ser cada año mejor persona, mejor amigo, mejor hijo. En una palabra, es buscar continuamente ser un hombre mejor.

 

 Aspectos de la superación personal:
La personalidad del hombre está compuesta por diferentes aspectos, físico, estético, afectivo, intelectual, creativo, social, moral y espiritual.
 

Aún cuando podemos desglosar la personalidad en varios y diferentes aspectos, la superación busca mejorar cada uno de ellos en forma balanceada. O sea, una superación armónica de todos los aspectos que mencionamos. Solo así podemos alcanzar un equilibrio y sentirnos emocionalmente a gusto.
 

Vamos a analizar cada uno de ellos:
 

Aspecto físico: mejorando nuestra salud por medio de una alimentación balanceada, ejercicio constante e higiene. Mejorando nuestro arreglo personal, vistiendo de manera agradable y pulcra, poniendo esmero y cuidado en nuestra apariencia.
 

 Aspecto afectivo: una de nuestras mayores riquezas como personas es nuestra capacidad afectiva. Debemos aprender a dirigir nuestras emociones y sentimientos, para qué toda esa fuerza, sea canalizada positivamente; por ejemplo, que mi humor no rija mi conducta, que no juzgue los actos de los demás por las simpatías o atracción que sienta por ellos, que la crítica o la falta de reconocimiento o alabanza no me hagan desistir de mis esfuerzos.
 

Aspecto intelectual: desarrollando mi inteligencia, aprendiendo a observar detenidamente todo lo que me rodea, reflexionando y ejercitando mi capacidad de juicio. Enriqueciéndola leyendo cosas útiles y positivas, buscando nuevos horizontes, atreviéndome a ser creativo
 

Aspecto Social: tener ambiciones legítimas, que no sean dañinas a los demás. Ser miembro consciente y responsable de la comunidad, aportando todo aquello que sea de utilidad al bien común, desarrollando al máximo todos los roles que me tocan asumir como hijo, estudiante, esposo, padre, madre, profesionista, vecino, etc.


Aspecto creativo: hacer un uso racional y equilibrado de los bienes económicos sin importar la cantidad que se tenga. No caer en el consumismo desenfrenado de tener por tener, pensando en que esto nos va a dar felicidad. La felicidad depende no de lo que nos sucede o tenemos, sino de nuestra actitud frente a ello. Por eso es que vemos gente que, teniendo todo para ser feliz, es amargada y a personas con muchos problemas que son verdaderos propagadores de alegría. Comprar y tener lo que verdaderamente necesitamos o disfrutamos.
 

 Aspecto estético: en tres sentidos:
1.- en mi persona, mi imagen hace que yo me acepte y me estime. Si no me gusto, no me acepto. No tiene que ver con la belleza de los rasgos. Muchas veces pensamos que cierta persona es guapa y quizás no lo es, pero proyecta autoaceptación.
2.- en el medio ambiente que me rodea, en la casa, la oficina, la escuela que esté siempre ordenada y limpia, con algún detalle. El desorden externo entra dentro de nosotros y nos tensa. Los medios físicos repercuten en una mayor estabilidad emocional. Los recursos económicos no tienen nada que ver con este aspecto. Puedo tener una casa enorme y muy descuidad o una pequeña en donde todo esté en orden, con detalles bonitos.
3.-valorando la belleza de la naturaleza, nos hacemos más sensibles y gozamos más todo lo que nos rodea. Si quiero a la naturaleza, la cuidaré mejor y por lo tanto ayudaré a que el equilibrio ecológico se conserve. La gente que sabe disfrutar de la naturaleza, siempre tiene algo que la hace feliz a pesar de tener problemas o crisis. No necesita de diversiones sofisticadas: admirar un árbol o un atardecer o salir al campo, la llena de felicidad.
 

 Aspecto moral: haciendo uso de la verdadera libertad que es no hacer lo que me da la gana, si no, hacer lo que debo basándome en el recto juicio de la inteligencia y de las metas que me he propuesto.
 

 Aspecto espiritual: haciendo crecer ese anhelo inherente en todo hombre; la búsqueda de los valores esenciales a la naturaleza humana, el amor, la igualdad, etc., siendo congruentes con sus creencias y dando a su vida un sentido de trascendencia.